Los sobaos de Cantabria son uno de los dulces típicos de la región. Los más conocidos suelen ser los llamados sobaos pasiegos, cuyo nombre se debe a la comarca de los Valles Pasiegos, su lugar de origen.

Aunque hoy en día, ya se producen sobaos de mantequilla en múltiples lugares de Cantabria, y no por eso son peores sobaos; de hecho en la zona oriental de Cantabria, se encuentran los sobaos de Casa Escojo, unos de los mejores sobaos de mantequilla de Cantabria, elaborados artesanalmente con la mejor materia prima y bajo pedido. ¡Te sorprenderán!.

Probar los sobaos de Cantabria es disfrutar de la tradición repostera montañesa de nuestra tierra. Un regalo para el paladar, con sus toques dulces por el azúcar, con el que puedes acompañar una merienda, un desayuno o cualquier experiencia gastronómica.

Si quieres conocer un poco más sobre la historia de este exquisito manjar, sigue leyendo.

Orígenes e historia de los sobaos de Cantabria

El norte de España, y en particular Cantabria, siempre ha tenido una larga tradición en la elaboración de productos lácteos. Entre ellos, la leche, el queso y la mantequilla han sido casi siempre los protagonistas de la economía rural, ganadera y artesana desde la Edad Media e incluso antes.

El sobao pasiego nace de la combinación de la mantequilla con el pan pasiego. Al principio, el sobao se hacía solamente con miga de pan, huevos, mantequilla y miel. Así es como eran los sobaos pasiegos antiguos. Más tarde, se fueron añadiendo otros ingredientes, como el limón o el anís, y se sustituyó la miel por el azúcar. Las versiones más actuales han sustituido también la masa de pan por harina de trigo.

¿Por qué se llaman sobaos?

Aprovechando las técnicas tradicionales de amasado de pan, una vez cobraba una textura más ligera y suave, se volvía a amasar, un proceso que actualmente conocemos como sobar.

El sobao es, por tanto, el proceso de amasar otra vez el pan sobrante y añadiéndole el toque de la mantequilla, el azúcar y el huevo. Y de ahí surge este delicioso alimento, que ha superado las fronteras de Cantabria para convertirse en un producto de lo más popular.

Textura y sabor del postre artesano más delicioso

Entre las ventajas del auténtico sobao de Cantabria, hay que mencionar que tiene un color amarillento y con una superficie ligeramente tostada, que le da un aire muy delicioso.

La textura, por otra parte, es densa, esponjosa y tiene un toque jugoso. No es un dulce seco, sino una verdadera delicia en la boca. Se siente su toque dulce y su aroma a mantequilla desde el primer momento.

Hablamos de una pieza de repostería de gran calidad, que te aporta una gran energía y tiene un carácter robusto. Los sobaos de Casa Escojo son muy nutritivos y pueden ser el regalo perfecto para quienes quieran disfrutar de uno de los dulces más deliciosos.

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